Optimización SEO. Lo que debes saber

Aunque nunca llegaremos a saber todos los parámetros que Google utiliza para medir la relevancia de un sitio web para tener un mejor posicionamiento SEO, en nuestra mano está el ponérselo más fácil para que entienda en qué temas está especializada nuestra web. Está claro que si descuidamos la optimización interna lo único que estamos haciendo es complicarle la vida al buscador a la hora de interpretar el tema en que queremos centrarnos, lo cual, como es lógico, no nos ayudará demasiado a que nos otorgue un tratamiento preferencial a la hora de conseguir un buen posicionamiento web.

No hay que perder de vista que, contra lo que muchos parecen entender, Google no es un ente con poderes sobrenaturales, sino tan sólo un conjunto de instrucciones que sirve para proporcionar resultados relevantes en torno a una búsqueda concreta. Por eso, si no ponemos a su alcance las herramientas necesarias para que sea capaz de interpretar de qué trata nuestro sitio, no podrás conseguir un buen posicionamiento SEO
Así pues, antes de maldecir su algoritmo y culparlo de todos nuestros males, toca hacer autocrítica y preguntarse. ¿Estoy indicándole de forma clara e inconfundible cuál es el tema sobre el que trata mi sitio web?

Si no estás seguro, quizás haya llegado el momento de profundizar en nuevas técnicas que permitan al buscador obtener una respuesta inconfundible. Para ello, vamos a hacer un repaso de alguna de estas técnicas que pueden llevar la optimización interna de tu web un paso más allá, después os daremos los consejos.

Palabras clave

El uso de palabras claves en lugares relevantes ha sido desde siempre la forma más básica de optimización. Y aunque ha perdido importancia, y ya no resulta tan decisiva, es evidente que en este sentido es necesario cumplir unos mínimos. Esos mínimos pasan por incluir la palabra que queremos posicionar en el título, el texto y las imágenes.

Frecuencia comparativa de términos

Entramos aquí a manejar conceptos más complejos como las relaciones entre palabras. Uno de los modos que Google tiene de medir la importancia de determinada palabra clave en un texto no es tanto la densidad de la misma como el número de veces que ésta aparece en relación a lo que se espera en un texto de similares características.
Dicho de otro modo, cuando Google valora nuestro texto y se fija en una keyword, no toma nuestro texto por separado y le otorga un valor, sino que lo compara con miles de textos similares y le da una calificación basándose en las conclusiones que extrae de dicha comparativa.
Si la keyword que estamos intentando posicionar en el texto es menos frecuente de lo habitual en ese tipo de documentos, Google le otorgará mayor valor, aunque otras palabras clave aparezcan con mayor frecuencia a lo largo del mismo.

Sinónimos y variaciones

Abundando en el concepto anterior, la riqueza de términos con la que podemos referirnos a un tema jugará a nuestro favor a la hora de valorar un contenido. Evitar el centrarnos en un vocabulario reducido y utilizar en nuestros textos un amplio abanico de sinónimos y palabras que mantengan algún tipo de relación semántica con la keyword elegida son dos consejos que resultarán de gran utilidad.
Esta forma de actuar refleja, de algún modo, una mayor naturalidad en el lenguaje, ya que las variaciones a la hora de realizar una búsqueda son una constante con la que Google está acostumbrado a tratar desde hace mucho tiempo, y entiende su naturaleza.
Cien personas pueden estar buscando información sobre el mismo tema y expresar sus búsquedas de cien formas diferentes, por lo que la riqueza en el vocabulario y las variaciones sobre un término son elementos muy apreciados por el buscador.

Destacar el contenido relevante

La información relevante debe estar en concordancia con el lugar donde la ubicamos y la forma en la que la mostramos. No en vano los buscadores otorgan un mayor peso al contenido expuesto en la parte principal de la página, el cuerpo de texto, ya que se entiende que es éste el lugar adecuado para desarrollar la información que queremos transmitir.
Esto adquiere aún más importancia teniendo en cuenta que cada vez más público consulta información desde dispositivos móviles, y que éstos, ante la imposibilidad de mostrar la pantalla al completo, priorizan la zona central.

Relaciones semánticas

Resulta complicado entender que un buscador sea capaz de conectar dos términos diferentes entre sí y otorgarles una relación semántica, y verdaderamente es una tarea compleja.
La forma en la que han resuelto esta cuestión no es perfecta, pero conocerla nos da una guía para poder optimizar mejor nuestros textos.
Los motores de búsqueda entienden que existe mayor relación semántica entre dos términos si estos se encuentran en el mismo párrafo que si están separados por varios bloques de texto. Pero a su vez, establecen otros parámetros, como que todos los elementos de una lista son idénticamente distantes en cuanto a su relación semántica y que lo mismo ocurre con las palabras incluidas en el título con respecto al resto de palabras incluidas en el texto.

Frases relacionadas

El modo en que Google analiza el contenido ha ido haciéndose cada vez más preciso. De las palabras claves se evolucionó hacia las palabras relacionadas, pero en un estadio superior encontramos la indexación en base a frases relacionadas.
¿Qué significa esto? Que Google rankea determinadas páginas en base a la relevancia de frases concretas, y esta operación la lleva a cabo mediante un proceso llamado co-ocurrencia.
La Co-ocurrencia consiste en dilucidar qué frases aparecerán tras la aparición de una frase determinada. Es, por decirlo de algún modo, una forma de predicción.
Si tras leer frases que contienen determinado término, aparecen durante el texto otras que el buscador prevé que pueden aparecer por su experiencia anterior, ello fortalecerá la relación de la página con dicha palabra clave.

Relaciones significativas entre términos

De cara al futuro hay que esperar, que Google continúe avanzando en esta línea y por tanto otorgue un valor cada vez mayor a las relaciones significativas entre términos.
Esto significa que, si a lo largo del texto hay una palabra que de algún modo está conectada con muchos otros términos que aparecen en el mismo, dicha palabra cobrará gran importancia.
Así, en un texto en que aparezca la palabra “deportista”, junto a otras como “olimpiadas”,“futbolista”, “nadador”, “ciclista” o “ganador”, dicha palabra será altamente relevante para calificar dicho documento, aunque sólo aparezca una vez en el texto, ya que mantiene una relación significativa muy fuerte con los demás términos.

Consejos para mejorar tu optimización interna cara al SEO

Una vez ya conocemos algunas técnicas avanzadas que se usan para la optimización interna, podemos simplificar y resumirlas en unos consejos más sencillos que permitirá que la optimización de tus páginas y sitios web mejore respecto a su situación actual. Vamos con ellos:

1) Todo empieza con la búsqueda de palabras claves

Seleccionar las palabras clave adecuadas no es suficiente, pero es el primer paso a partir del cual debes comenzar a desarrollar tu estrategia. Conocer para qué palabras claves quieres competir es fundamental, porque de este modo sabrás a qué y a quienes te enfrentas. A partir de ahí, lo que toca es crear contenidos conectados con las keywords que hayas seleccionado, te dejo el enlace a un fantástico artículo de uno de los mejores SEO de España mi tocayo José B Moreno.

2) Avanzando un paso más: busca temas relacionados a tus palabras claves

En lugar de centrarnos en las palabras clave que hayamos seleccionado, podemos ir un paso más allá y crear contenido de temas relacionados con dichas palabras. Analizando qué términos son los que se utilizan al describir nuestras keywords o qué temas tienen una vinculación directa con ellas es relativamente sencillo desarrollar esos temas. A los ojos de Google nuestro contenido será más natural puesto que estaremos estableciendo relaciones conceptuales en lugar de centrarnos en repetir machaconamente una palabra.

3) Si quieres crear buen contenido, ofrece respuestas

Para que tu contenido resulte verdaderamente relevante, ha de dar respuesta a las preguntas que se plantean en un tema en concreto. Pregúntate qué necesita saber una persona que busca información referente al tema del que estás escribiendo y ofrécele la manera más clara y estructurada de dar respuesta a sus inquietudes.

4) La variedad en el lenguaje es importante

No todos buscamos igual ni utilizamos las mismas palabras. A la hora de desarrollar un tema resulta un ejercicio muy valioso el anotar distintas maneras en las que la gente puede buscar la información, y posteriormente incluir dichas frases en el contenido. Esto, además, le proporciona una variedad semántica que lo enriquece.

5) El contenido importante, en el lugar más destacado

Igual que un periódico remarca la importancia de una noticia por medio del tamaño del titular o la fotografía, nosotros también hemos de dotar al contenido importante de la relevancia que le corresponde. Aquí basta con dejarse guiar por lo que nos indica el sentido común: lo verdaderamente importante que queremos contar no puede ir en una barra lateral o en el footer. La información principal ha de ir en el cuerpo del texto y ser resaltada para que no pase desapercibida.

6) Da a la estructura la importancia que merece

Cuando escribimos contenido estamos tratando de transmitir información, por lo tanto, cuanto mejor estructurada sea ésta, más fácil será que el lector pueda asimilarla. Google es capaz de diferenciar cuando una información se expone de forma clara, con subtítulos, apartados, listas, fuentes, etc, y le aporta a esa información más valor que cuando la mostramos como un batiburrillo de letras sin espacios ni párrafos o con faltas de ortografía.

Por lo tanto, preocuparse por dar a la información una estructura clara que facilite su comprensión nos hará ganar puntos y logrará que nuestro contenido resulte mejor valorado. Merece la pena, pues, dedicar unos minutos antes de comenzar a escribir para diseñar el modo en que vamos a contar lo que queremos hacerle llegar al lector.

La optimización interna de tus páginas tiene, por tanto, un componente muy importante en lo relativo a cómo expones la información. No hay que complicarse en exceso ni buscar fórmulas mágicas, sino tratar de escribir para personas y facilitarles la comprensión de aquello que estamos intentando comunicarles. Google ya ha marcado la línea a seguir, y con esa guía en mente, no debería de resultar complicado seguir el rumbo correcto.